El Teatro Nacional Cervantes en 2023: Un recorrido federal a través de las tablas argentinas
En el año 2023, se vivió un extenso despliegue de estrenos teatrales en siete provincias argentinas, promoviendo la diversidad en teatralidades, dramaturgias, actuaciones, lenguajes, poéticas y modalidades de trabajo. El Teatro Nacional Cervantes (TNC) marcó presencia no solo en su sede en Córdoba y Libertad, sino también en distintas provincias a través del programa “TNC Produce en el País”. Este año, la iniciativa destacó la riqueza de producciones artísticas, respaldada por una política pública que busca fomentar la diversidad en diferentes aspectos del teatro nacional.
El programa, con 16 años de trayectoria, ha evolucionado a lo largo del tiempo, adoptando diversos formatos. Desde la institución, subrayan su rol en el desarrollo de artistas argentinos en sus propios territorios, colaborando con organismos e instituciones provinciales y municipales. En el año 2022, se presentaron 109 proyectos, de los cuales se seleccionaron siete para ser producidos íntegramente en la temporada actual. La curaduría estuvo a cargo de Maite Aranzábal (Río Negro), María de los Ángeles “Chiqui” González (Santa Fe) y Carlos Leyes (Formosa), con la participación de la directora del TNC, Gladis Contreras, el subdirector Jorge Dubatti y la coordinadora del Programa Federal, Dora Milea.
Un equipo dedicado del TNC trabaja todo el año para garantizar los estrenos en diversas localidades del país. Martín Lavini supervisa la producción técnica, Maxi Libera y Poli Bontas se encargan de la producción ejecutiva, Enrique Iturralde maneja la prensa, y un equipo de fotógrafos, compuesto por Gustavo Gorrini, Mauricio Cáceres y Ailén Garelli, captura imágenes de ensayos y funciones. Aimé Pansera se encarga del área de Gestión de Públicos junto a artistas, académicos y espectadores locales.
La temporada inició en mayo en el Teatro Español de Santa Rosa (La Pampa) con “De quién es el mar”, un proyecto de Astrid Urban que exploraba el deseo de una persona trans de migrar a otro cuerpo. En junio, en el Teatro Real de Córdoba, se estrenó “Mientras los filósofos duermen”, creado por Paco Giménez, inspirado en “La cueva caliente” de Raúl González Tuñón, abordando la eterna lucha entre opresores y oprimidos.
El proyecto “Otilia Buenaventura” de Luigi Serradori se presentó en julio en Monte Caseros (Corrientes), destacándose por abordar la violencia política de la última dictadura y sus impactos en la memoria colectiva. En agosto, Edgardo Dib presentó una versión libre de “Hedda Gabler” (Henrik Ibsen) en Santa Fe, incluyendo guiños locales y una escenografía que potenciaba el misterio de la protagonista.
En septiembre, en el Teatro Independencia de Mendoza, se estrenó “Los establos de su majestad”, un proyecto de Víctor Arrojo que exploraba la historia de Argentina como una gran estancia, con referencias a la Campaña del Desierto. Octubre trajo consigo “Los lugares cambian”, proyecto de Rodolfo Pacheco presentado en San Salvador de Jujuy, que combinaba actuaciones de intérpretes de la tercera edad con jóvenes volcados a un lenguaje más físico.
El cierre del año se realizó con “Deus ex machina”, un proyecto de Ezequiel de Almeida estrenado en Villa Gesell. La obra se desarrolla en una vieja fábrica de bulones habitada por una familia que busca subsistir, y destaca por explorar la historia de Mar Azul, un lugar que el director considera “mágico” y lleno de leyendas.