Lee Tamahori, el director neozelandés detrás del aclamado drama neozelandés «Once Were Warriors» y de éxitos de taquilla de Hollywood como la película de James Bond «Die Another Day», ha fallecido. Tenía 75 años.
La familia de Tamahori dijo que el director murió tras una batalla contra la enfermedad de Parkinson.
«Su legado sigue vivo con su whānau, su mokopuna, cada cineasta que inspiró, cada frontera que rompió y cada historia que contó con su ojo genial y su corazón honesto», dijo la familia en un comunicado a la emisora pública neozelandesa RNZ.
Nacido en Wellington en 1950, de ascendencia maorí por parte de padre y de ascendencia británica por parte de madre. Tamahori causó un impacto inmediato con su primera película de 1994, «Once Were Warriors». Una descripción cruda y sin remordimientos de la vida maorí, que se convirtió en un hito del cine de Nueva Zelanda y lo convirtió en una nueva y emocionante voz en la industria.
Hollywood se apresuró a llamar, y Tamahori pasó a dirigir el thriller de supervivencia «The Edge» en 1997 con Anthony Hopkins y Alec Baldwin, seguido de «Along Came a Spider» en 2001. Luego, en 2002, llegó su película más importante, «Die Another Day», la última película de Bond de Pierce Brosnan que también protagonizó Halle Berry (y tuvo un cameo de Madonna). Aunque la dirección de Tamahori fue elogiada, la película recibió críticas mixtas. Pero aun así recaudó 432 millones de dólares en la taquilla mundial.
Las películas posteriores de Tamahori, «XXX: State of the Union», «Next» y «The Devil’s Double», no lograron el mismo impacto y obtuvieron resultados teatrales decepcionantes. Tras un periodo de relativa calma, regresó al cine de su país natal con “Mahana” en 2016 y “El Convertido” en 2013.















